No importa lo diferente que pueda ser nuestro estilo de vida, si nuestro espacio es pequeño o muy amplio, la gran parte de nuestras actividades domésticas se van a desarrollar en la cocina. Todo el tiempo la estamos visitando ya sea para preparar la comida, limpiar los trastes o ir por un tentempié a media tarde, la cocina es el lugar de mayor tránsito y es primordial que su diseño y acomodo sea el más cómodo y práctico de todo tu hogar.

Evita obstruir el triángulo de trabajo
El llamado triángulo de trabajo es aquel que se forma entre el refrigerador, el fregadero y la placa de cocina (el lugar donde picas los alimentos o trabajas). Esta zona es la de mayor actividad y es la que debes cuidar más a la hora de diseñar tu espacio. Lo ideal es que la distancia entre estos tres elementos no sea muy amplia y que no haya obstáculos que impidan el flujo natural del movimiento.

Cuida mucho la iluminación
Contar con una buena iluminación es ideal ya que trabajamos con objetos punzo cortantes entonces es importante poder ver bien lo que estamos haciendo para no lastimarnos. Además, al trabajar con comida, el poder visualizar el estado de la misma es esencial para no consumir alimentos caducados o con hongos. Una iluminación general con luz blanca es la mejor para este espacio de trabajo y, si lo necesitas, refuerza las zonas complicadas, como debajo de estantes, con luces led.

No olvides la buena ventilación
El uso de una buena campana extractora te ayudará a liberar olores molestos al momento de cocinar. Además, si llegar a ocurrir un accidente y se te quemó la comida, la campana extractora te ayudará a eliminar rápidamente los malos olores y humo que se pueda generar. Además de esto, no olvides considerar el espacio de la cocina uno con ventanas amplias, especialmente si es una cocina pequeña, ya que esto no solo agregará luz si no también te ayudará con la ventilación.

Cuenta con el espacio de almacenamiento adecuado
La cocina es donde más almacenamos cosas: desde utensilios para cocinar, comida y hasta artículos de limpieza. Es esencial contar con un buen espacio de almacenamiento y aprovechar cada lugar, especialmente si tu espacio es pequeño. Puedes incluso incluir una isla que cuente con cajones para guardar más cosas si te gusta cocinar mucho.

No olvides que, además de estos tips de diseño, lo más importante es utilizar materiales que soporten el alto tráfico del espacio pero también las distintas sustancias y temperaturas con las que pueda tener contacto. Por ello, el porcelanato es tu mejor opción: se adapta a altas y bajas temperaturas, es poco poroso así que no absorbe la humedad y es muy resistente así que no se romperá ni rayara incluso si decides cortar o picar comida sobre él.